La gigante Fonterra, importante referencia del mercado global de productos lácteos, está fusionando sus negocios en Australia y Nueva Zelanda para formar Fonterra Oceanía, publicó la australiana InsideFMCG, página web de noticias e información para la industria australiana de bienes de consumo.
Fonterra Oceanía comenzará a funcionar el 1 de mayo, René Dedoncker estará al frente de la nueva entidad. Dedoncker ocupó varios puestos de liderazgo global antes de convertirse en jefe del negocio australiano en 2017.
Fonterra Brands New Zealand (FBNZ), que comprende marcas de consumo y empresas de servicios de alimentos en Nueva Zelanda, incluidas Anchor, Mainland y K’piti, continuará utilizando leche de agricultores neozelandeses; en tanto que el grupo de leche australiano continuará proporcionando sólidos lácteos para las marcas e ingredientes australianos de la compañía.
Miles Hurrel, CEO de Fonterra, dijo que “los negocios (de la compañía) en Australia y Nueva Zelanda tienen muchos aspectos complementarios, y su integración se basa en esas fortalezas”. Agregó su convicción de que “el cambio fortalecerá nuestra oferta transtasmana (así se denomina la relación Australia-Nueva Zelanda) en un mercado cada vez más competitivo”.
SUSTENTABILIDAD
Por otra parte, otros medios informaron que René Dedoncker, un líder experimentado con un historial de roles globales dentro de Fonterra desde 2005, encabezará el equipo recién creado en Fonterra Oceanía, supervisando las operaciones integradas de la empresa tanto en Nueva Zelanda como en Australia, para multiplicar los negocios desde ese continente.
Este año 2024 representa para la empresa una contracción de ingresos del 12%, pero las ganancias siguen siendo importantes en un contexto de avanzar hacia el objetivo de reducir en 30% las emisiones de gases de efecto invernadero, respecto a los registros de 2018.
Al parecer, la cooperativa neozelandesa ha marcado una prioridad firme en lograr la sustentabilidad económica de la empresa y de la producción.
Asimismo, Hurrell observa un “aumento en la demanda, principalmente de Medio Oriente y el Sudeste Asiático, de nuestros productos básicos de referencia y esto se ha reflejado en los precios del GDT”, siendo del 10% el alza en los tambos y del 11,5% en los valores de la subasta electrónica, para la leche.
En el futuro “el impacto potencial de la inestabilidad geopolítica y la interrupción de la cadena de suministro en la demanda de las principales regiones importadoras sigue siendo incierto”, pero afortunadamente la cooperativa tiene una buena “escala y diversificación en los mercados, lo que nos brinda opciones”.