El estudio de PROFECO subraya que el queso americano “Great Value” cumple con las características esenciales para ser considerado un producto genuino. Su composición incluye un 50.9% de agua, un 14.7% de grasa láctea 100%, 17.5% de proteína y 11.4% de carbohidratos, aportando 248 kcal por cada 100 gramos. Además, la Procuraduría verificó que no contiene almidón y que su etiquetado proporciona información clara y precisa al consumidor, aspectos cruciales para la confianza del consumidor.

Esta revelación cobra mayor relevancia al considerar que otras marcas populares de queso amarillo no lograron superar las estrictas pruebas de calidad impuestas por PROFECO. Este contraste posiciona a “Great Value”, una marca con más de 30 años en el mercado y parte de la cadena Walmart, como un referente de fiabilidad. Su propuesta de valor se centra en ofrecer precios accesibles sin comprometer la calidad del queso, una combinación atractiva para el bolsillo y la salud.

La preocupación por la presencia de aditivos no lácteos y, más recientemente, de microplásticos en los alimentos, ha impulsado a organismos como PROFECO a intensificar sus análisis. El hecho de que este queso amarillo haya sido certificado como auténtico y libre de estas impurezas es una noticia significativa para el sector agroindustrial, ya que valida la posibilidad de ofrecer productos procesados que mantengan su integridad y seguridad alimentaria.