La combinación de aranceles bajos para quesos extranjeros y el encarecimiento de insumos básicos estrangulan la rentabilidad de los productores lecheros nacionales.
El sector lechero nacional se encuentra bajo una intensa presión económica debido a un doble factor adverso que impacta directamente en la rentabilidad de las granjas: la creciente importación de quesos a precios subsidiados y la persistente alza de los costos de producción. Los ganaderos denuncian que la entrada masiva de quesos extranjeros, que ingresan con aranceles inusualmente bajos o nulos, genera una competencia desleal que hunde los precios de la leche cruda y los quesos mexicanos. Este escenario de desequilibrio comercial es una alerta roja para la agroindustria y la seguridad alimentaria del país.
La competencia desleal generada por las importaciones de lácteos se exacerba con el constante aumento de los insumos esenciales para el ganado lechero. El precio del alimento balanceado, de las vitaminas, los combustibles y la energía eléctrica continúa escalando, elevando los costos operativos de las explotaciones lecheras. El periodismo de datos revela que, mientras el costo de producción de leche se dispara, el precio de garantía y el valor pagado por la industria se mantienen estancados o caen debido a la saturación del mercado con quesos importados.
Este desajuste de precios y costos provoca que el esfuerzo de los productores por mantener la calidad de la leche y la productividad del hato no sea recompensado. La falta de márgenes de ganancia adecuados obliga a los ganaderos a sacrificar la inversión en tecnificación, mejora genética y mantenimiento de infraestructura, poniendo en riesgo la sustentabilidad a largo plazo del sector lácteo nacional. Los pequeños y medianos productores lecheros son los más vulnerables, enfrentando el riesgo de cerrar sus operaciones.
Ante esta coyuntura crítica, los líderes de las organizaciones ganaderas están exigiendo una intervención gubernamental urgente. Las peticiones se centran en la revisión de los acuerdos arancelarios que permiten la entrada de quesos extranjeros sin la debida reciprocidad y en la implementación de mecanismos de apoyo para mitigar la escalada en los precios de los insumos. La industria y los analistas concuerdan en que es esencial proteger la producción nacional de leche a través de políticas comerciales que equilibren el campo de juego.
En conclusión, la producción lechera está en un punto de inflexión, atrapada entre la presión importadora y el aumento de los insumos. La competitividad del queso nacional está en peligro, y la falta de acción podría descapitalizar las granjas y aumentar la dependencia de lácteos del exterior. La solución requiere una estrategia agroindustrial coordinada que proteja al productor primario de los efectos adversos de un mercado global desregulado.
Fuente: Para más detalles sobre el impacto en el sector, consulta la nota original en El Heraldo de Chihuahua.
Ahora puedes leer las #noticias más importantes en los canales de #Whatsapp de #eDairyNews!!
🇲🇽 eDairy News MÉXICO: https://whatsapp.com/channel/0029VaLDr0G4SpkLXxDY3t2x