La elaboración de la Cajeta de Celaya se basa en un proceso artesanal que ha sido transmitido de generación en generación, manteniendo la autenticidad y el sabor que la caracterizan. Esta dedicación a la tradición, combinada con la calidad de la leche de cabra local, es lo que la distingue. Para los productores de leche de cabra y los elaboradores de cajeta, este crecimiento en la demanda internacional significa un impulso económico significativo y el reconocimiento a su labor.

El camino de la Cajeta de Celaya hacia los mercados internacionales no ha sido fortuito. Ha requerido de esfuerzos en la promoción, la adaptación a normativas de exportación y la capacidad de producción para satisfacer la demanda creciente. Este dulce lácteo no solo se consume directamente, sino que también se utiliza como ingrediente en repostería y otras preparaciones, abriendo más nichos de mercado para la industria láctea especializada.

El éxito de la Cajeta de Celaya es una inspiración para otros productos lácteos artesanales y para el sector lácteo internacional. Demuestra que la autenticidad, la calidad y la historia cultural pueden ser poderosos diferenciadores en un mercado globalizado. El valor agregado de la tradición y la conexión con el origen son atributos que los consumidores de todo el mundo están dispuestos a apreciar y pagar.