El primero en comercializar el yogur fue Isaac Carasso. Hoy Danone ya tiene una historia de 105 años y en México 50 años. Todo comenzó en Barcelona en 1919 cuando el emprendedor español decidió popularizar el yogurt, consciente de sus beneficios después de haber investigado a fondo el asunto.

A su empresa le puso Danone en honor a su hijo recién nacido Daniel, apodado Danon. En 1923, hace 101 años, el yogurt tomó tanta relevancia que el Colegio de Médicos reconoció sus virtudes autorizándolo para prescripción médica.

Después de 62 años de haber sido creada la marca Danone, llegó Danonino en 1981, un producto que ayuda a los niños en el desarrollo de sus huesos. La multinacional con sede en París llegó a México en 1974 con su oferta láctea. Para 2012 (38 años después), Danone Lácteos abarcó el 45% de participación en el mercado mexicano.

El fortalecimiento de las líneas de producción incrementó la variedad y calidad de los productos.

La primera fábrica de Danone en México y su instituto de investigación

Para 1995 la empresa invirtió 40 millones de dólares (aproximadamente 720 millones de pesos), en la inauguración de su planta en Irapuato, Guanajuato, para fabricar yogurt y postres.

Con el firme propósito de investigar para ser mejores, Danone creó en 1998 el Instituto Danone en México, enfocado en la investigación sobre alimentación y salud. Diez años después, en 2008, hicieron una reestructura y el grupo quedó organizado en cuatro divisiones: lácteos, Bonafot, garrafones Bonafont y Danone Baby Nutrition.

En 2010, Bonafont lanzó su primer envase hecho 100% de material reciclable. Danone tiene el Programa Social Eco Alberto para llevar agua purificada a 130,000 habitantes de zonas indígenas de Hidalgo que viven en condiciones de extrema pobreza.

El programa social que apoya a los productores de leche

En 2010, Danone decidió darle la mano a los productores mexicanos para que reciban capacitación constante, obteniendo un precio justo por la leche que producen. “Tienen una ganancia estable y hasta tres veces mayor a la que percibían antes del Programa Social Margarita”, afirma la compañía en su sitio web.

De hecho, Danone y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) han ayudado a los productores a implementar tecnología para su negocio lechero. El Programa Social Margarita tiene el objetivo convertir a pequeños productores de leche en empresarios, pensando en que hagan un negocio sustentable, altamente productivo y de calidad.

Caso de éxito

Jaime Cortés ordeñaba a mano. Tenía que hacer 40 apretones a la ubre por un litro de leche. Una persona puede ordenar 25 vacas al día. Además, destinaba diariamente cuatro horas para llevar su leche a un punto de venta. Era una tarea muy ardua para este productor casado con 10 dependientes económicos.

En un inicio producía con 38 vacas 912 litros de leche y luego llegó a producir casi el doble: 1,655 litros. Ahora cuenta con un equipo de ordeña y ahorra cinco horas de su día. Esto ha sido posible gracias al Programa Social Margarita de Danone con el cual pequeños productores de México ya son empresarios.

Con nuevas prácticas los productores pueden mejorar la ordeña y elevar la producción. Danone se acerca a los productores y les ofrece crédito, una ordeñadora y un tanque de enfriamiento. Para ser parte de este programa debes estar dispuesto a producir leche con higiene, de manera amigable con el medio ambiente y cuidando a las vacas. Danone evalúa si tienes la capacidad de convertirte en empresario.

El proyecto “Margarita” está presente desde el 2010 en los Altos Jalisco. Trabaja de manera sustentable incorporando principios de bienestar animal y huella de carbono. Para los productores de leche en el país es una buena opción para acceder al mercado nacional. Los proyectos bien estructurados y monitoreados generan rentabilidad.

¿Cómo lograr que permanezca el negocio lechero en el campo?

México necesita que el país produzca más leche y de mejor calidad; y que los hijos de los productores se queden en el campo. Esto se va a lograr adoptando tecnología más adoc a la forma de vivir de los jóvenes.

Hoy con el Internet de las Cosas (IoT) es posible colocar sensores en las vacas para mejorar la productividad. Esto significa que el productor pueda tener un control las 24 horas de la salud, reproducción, fertilidad, producción y confort de su ganado.

Danone también apoya a los productores de leche con un sistema de información que conecta al productor y toda la cadena de valor. Así, el productor sabe sobre sus entregas, calidad de la leche, estados de cuenta del financiamiento, consejos técnicos, entre otras cosas.

En resumen: De la mano de Danone, los productores de leche pueden incrementar su productividad y rentabilidad, tener un pago justo, acceder a capacitación y asistencia técnica, logística y financiamiento. Además, el estar integrados a una cadena de valor les asegura permanencia y crecimiento de su negocio.

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