Jorge Alaniz dijo que el principal reto es incidir en los mercados para que los consumidores busquen la leche fresca, y así poder mantenerse.

La entrada indiscriminada de leche en polvo impacta directamente la economía de los establos lecheros que siguen en la actividad, afirmó Jorge Alaníz Campoy.

El presidente de la Asociación Ganadera Local de Productores de Leche en el Valle del Yaqui (Aglplvy), resaltó que enfrentan una competencia desleal que frena su crecimiento y está acabando con la actividad, pues en regiones como Hermosillo y Caborca ya no se produce leche.

“La importación indiscriminada de la leche en polvo pone en serios aprietos a los productores de leche fresca, porque satura el mercado”, apuntó.

El principal reto, apuntó, es incidir en los mercados para que los consumidores busquen la leche fresca, y así poder mantenerse en la actividad.

“Hay demasiada leche en polvo y la industria utiliza esta mezcla que desfavorece a los productores, se tiene que frenar la importación”, señaló.

SE DESCONOCE LA CANTIDAD DE LECHE QUE SE IMPORTA

A ciencia cierta, agregó, no se tiene el dato de cuánta leche en polvo se importa, pero la demanda de leche entera no ha crecido en los últimos dos o tres años.

Jorge Alaniz Campoy dijo que los productores de leche en el Valle del Yaqui se han mantenido, pese a los altos costos de producción, y recordó que fue en el 2016 cuando cerraron muchos establos.

Y la problemática se mantiene, añadió, pues los insumos siguen al alza con lo que los productores enfrentan una situación muy crítica.

“Los costos de producción ahogan a los productores”, abundó.

Cabe señalar que el Valle del Yaqui cuenta con 17 establos en producción y la proyección para el 2024 es producir 24 millones de litros de leche fresca que se destina a la industria pasteurizadora y la elaboración de quesos.