La edición 393 del Global Dairy Trade dejó un mensaje claro para el mercado internacional: la volatilidad volvió a escena.
El índice GDT cayó un -4,3%, revirtiendo la estabilidad que se venía observando en los últimos eventos y generando nuevas preguntas sobre la demanda global en este cierre de 2025. Con un precio promedio ganador de USD 3.507 por tonelada, el evento reflejó cierta presión bajista que impactó de manera transversal en varias categorías.
El evento 393 reunió a 146 postores participantes, de los cuales 117 lograron adjudicaciones, lo que evidencia una actividad sólida, pero con mayor cautela en las pujas. Se realizaron 22 rondas de negociación a lo largo de 2 horas y 15 minutos, mostrando un ritmo intenso, aunque menos agresivo que en eventos anteriores. Este comportamiento podría estar vinculado a una moderación de la demanda asiática y a un reacomodamiento de inventarios en mercados clave.
En cuanto a los volúmenes, la oferta mínima se situó en 33.466 toneladas, con un máximo posible de 40.668 toneladas, y finalmente se comercializaron 34.282 toneladas. La relación entre oferta y demanda mostró un mercado equilibrado, pero con compradores menos dispuestos a sostener precios altos, lo que empujó los valores hacia abajo.
Este resultado deja abiertas varias interpretaciones para el corto plazo: ¿se trata de un ajuste temporal propio de fin de año o estamos entrando en una fase más prolongada de presión bajista? Lo cierto es que el GDT 393 envía una señal de prudencia para exportadores, industrias y analistas que siguen de cerca las tendencias del comercio lácteo global.
