La planta de la marca Star Milk, situada en Mexicali, adeuda aproximadamente 4 millones de litros de leche a alrededor de diez productores primarios, y se sabe que la situación “está peor” en otra industria con presencia regional asentada en Tijuana, ya que el impago data de nueve semanas atrás.
La falta de “pago justo y oportuno” es el principal factor por el que han cerrado establos. En Tijuana, Tecate y Rosarito (donde se produce más leche) “han tenido que cerrar o han quebrado seis establos”. En Mexicali dejaron de operar siete, con un promedio de 200 vacas en producción, afirmó Gustavo Rodríguez Cabrales, presidente de la Unión Regional de Baja California.
Los ganaderos también han comenzado a vender vacas para sufragar la nómina de sus establos, pero han dejado de pagar a sus proveedores de alfalfa, granos, así como a laboratorios que les suministran medicamento y concentrados, con lo que se está afectando toda la cadena de valor.
Derivado de la falta de pago, productores en Ensenada optaron por destinar el 100% de su producción a la fabricación de quesos y ya no se entrega leche a la planta industrial.
Rodríguez Cabrales aseveró que los productores primarios, en su mayoría empresas pequeñas y medianas, no pueden financiar a los industriales que son organizaciones de mayor tamaño. La falta de pago no se justifica, ya que el consumidor compra la leche pagándola al momento. De seguir las “políticas injustas” de algunos industriales, dijo, irán desapareciendo los pequeños productores.
En entrevista con ZETA, demandó que como cabeza del sector, la Secretaría de Agricultura estatal tenga un mayor compromiso con los productores primarios, los defienda y ayude a solucionar el conflicto, pues si bien el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de Baja California, Juan Meléndrez Espinoza, se ha reunido y han llegado a acuerdos con representantes de Star Milk, estos no se han respetado y, hasta el cierre de edición (miércoles 7 de febrero) se mantenía el adeudo con los ganaderos.
“Reiteramos el llamado a la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda para que intervenga, tome cartas en el asunto”, puesto que el adeudo atenta contra los productores primarios, quienes son los que producen los alimentos que consume la población en la entidad.
“Necesitamos a la industria y la industria nos necesita, necesita productores confiables, comprometidos con la sanidad, la calidad y la inocuidad de sus productos, por eso la importancia y el llamado a la industria para que sean conscientes y den un trato justo a los productores de leche y a los de cualquier otro sector”, exhortó.
Otro desafío que están enfrentando los ganaderos es el incremento de entre 20 y 30% en el costo de insumos, como forrajes, concentrados, medicamento, transporte, exámenes para medir mastitis y otros parámetros que garantizan la calidad de la leche.
No obstante, el sector no ha sido tan impactado por el aumento del 20% al salario mínimo, ya que el personal de los establos gana más de un salario mínimo, aunque las empresas sí han tenido que destinar más recursos para pagar cuotas patronales al Seguro Social e Infonavit.
Ante el incremento en el costo de su operación, el líder ganadero considera que sigue siendo bajo el precio por litro de leche que se vende a la industria. “A algunos productores les están pagando alrededor de 11 pesos por litro, hay otros que andan en 10.30 pesos”, de modo que el productor primario debe complementar sus ingresos con la venta de becerros machos y de vacas de desecho.
COMPETENCIA DESLEAL
Cifras preliminares del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) indican que el año pasado se produjeron 212 mil 041.944 litros de leche en Baja California; esto es, 3 mil 387.337 (+1.62%) más que en 2022.
Rodríguez Cabrales comentó que existen alrededor de 40 mil cabezas de ganado lechero y que el aumento de la producción de leche anual está “muy abajo” del crecimiento de la demanda, debido a la competencia desleal que genera la importación de leche en polvo que se rehidrata para ser comercializada y las fórmulas lácteas.
El Estado maneja una información sobre el número de toneladas que se importan, la Federación maneja otra y “realmente no sabemos el polvo que se está importando, rehidratando y qué está saliendo al consumidor como una leche entera, que no lo es, y también es una competencia desleal, porque no tiene el mismo costo de producción”, observó.
Hace falta que, en conjunto, productores, industriales y autoridades hagan una campaña de promoción de leche, así como una mayor vigilancia de la Procuraduría Federal del Consumidor para evitar “la venta de productos que engañan al consumidor”, manifestó.
Al respecto, Luis Roberto Ayala Martínez, director de Inspección e Inocuidad de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del Estado, reconoció que “no es suficiente” la producción para cubrir la demanda, pero también se debe “aceptar que hay familias que han optado por productos lácteos de menor calidad” por falta de economía.
Un producto lácteo combinado tiene 50% de leche en polvo es hidratado y combinado con otras sustancias. En el país sí están marcados los productos que no cumplen con la Norma Oficial Mexicana (NOM) que establece que la leche es aquella que proviene de un animal. “Nutrileche ahora es Nutri, porque no cumple con esa NOM. Antes había leches de almendra, coco”, expuso Ayala. Ahora son agua saborizada y ya no aparece la leyenda leche de almendra.
BC, CUARTO LUGAR EN TUBERCULOSIS
Desde la Unión Regional de Baja California, Gustavo Rodríguez Cabrales señaló que Baja California ocupa “tristemente el nada honroso cuarto lugar en tuberculosis bovina”, pero se está trabajando con autoridades para reducir la incidencia de esta enfermedad zoonótica; es decir, que se transmite de animales a humanos y de humanos a animales.
Por su parte, Luis Roberto Ayala Martínez, funcionario de la Secretaría de Agricultura estatal, comentó que la presencia de tuberculosis bovina ha ido disminuyendo a lo largo del tiempo y actualmente se trabaja en un proyecto de vacunación en conjunto con Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), SADER, Departamento de Agricultura de Estados Unidos y el Comité de Fomento y Protección Pecuaria.
El proyecto, con duración de cinco años, consiste en probar tres vacunas y un efecto placebo a animales de cuatro establos ubicados en Valle de Las Palmas, en la cuenca lechera de Rosarito y en El Florido. Actualmente va en dos años y medio.
Al final, “si todo sigue como se ha marcado al día de hoy, podremos tener la primera vacuna contra la tuberculosis, y estaríamos dando un avance fortísimo y hasta un cambio de paradigma en lo relativo al TBR, y, por ende, bajar la prevalencia de la enfermedad”, agregó.
Otra enfermedad que afecta al ganado es la brucelosis animal. Según la SADER, Mexicali, Tecate, Tijuana y Rosarito son áreas consideradas en control, en tanto que Ensenada, San Quintín y San Felipe están en fase de erradicación.
En la zona B del Estado –integrada por Mexicali, San Felipe, Tecate, Rosarito y Tijuana- se tiene una prevalencia de 0.013% y se han tenido 12 cuarentenas de brucelosis, “lo cual es muy bajo”, aseveró Ayala Martínez.
“Si es un animal que está dentro de un establo lechero, tanto la brucella como la tuberculosis no van a llegar a afectar a ningún ser humano porque se pasteuriza la leche”, igualmente ocurre con los quesos pasteurizados, “por eso se está buscando hacer una campaña de ‘Come quesos pasteurizados y netamente de tu Estado’, para que no tengamos enfermedades dentro de casa”, indicó.
Aunque Rodríguez Cabrales coincide en que la tuberculosis y la brucelosis se eliminan con la pasteurización, refirió que existe el riesgo para la salud pública de que haya establos o productores que podrían estar vendiendo la leche para el queso u algún otro consumo bronco.
José Luis de la Rosa Romero, médico zootecnista representante de Senasica en BC, explicó que la tuberculosis es una enfermedad producida por una bacteria que causa que el ganado bovino deje de desarrollarse y provoca pérdidas económicas para el productor.
La enfermedad de brucelosis también es una bacteria que puede transmitirse al humano y a otras especies, como puercos, caballos, y perros. Principalmente genera abortos en los animales, lo que va demeritando la calidad de los productos y afecta a todo el hato ganadero.
A la brucelosis se le da seguimiento conforme a la NOM-041. Establece que como la enfermedad es de muy rápido contagio y una vez presente se recomienda el sacrificio del ganado, ya que el costo del tratamiento médico sería demasiado alto y ya no sería factible para la inmunidad pecuaria.
Asimismo, De la Rosa Romero apuntó que Baja California está libre de rabia paralítica y garrapata, afecciones que están presentes en ganado bovino en otras entidades de la República Mexicana.
MÁS PRODUCCIÓN DE BECERROS SIN SEQUÍA
De acuerdo con Gustavo Rodríguez, el sector ganadero de la entidad produce alrededor de 110 mil toneladas de carne, la gran mayoría se consume de manera local y regional, sólo se exportan cortes finos principalmente a Estados Unidos.
La producción se ha mantenido, pues se siguen sacrificando alrededor de 350 mil cabezas. “Como proveedores de la industria andamos proveyendo alrededor del 20% de los bovinos que este mercado requiere”, afirmó el presidente de la Unión Regional de Baja California.
En 2022 la producción de animales fue de aproximadamente 40 mil debido a la sequía, pero afortunadamente tal situación comenzó a revertirse y se espera que en 2024 la producción de becerros repunte y cierre con 55 mil. De seguir así, “el próximo año podríamos alcanzar alrededor de 70 mil”, auguró.
