La lluvia del último mes amortiguó la sequía y también representó un aliciente para los productores agropecuarios que todavía no se recuperan de los efectos de la baja precipitación pluvial que se prolongó desde el 2022.
El presidente de la Unión Ganadera Regional de Querétaro (UGRQ), Romualdo Moreno Gutiérrez, explicó que estos chubascos son un respiro para el sector, debido a que mejoró el almacenamiento en algunas presas.
De igual manera, aumentó la captación en varios cuerpos de agua, sobre todo en la región serrana que, junto con el semidesierto, ha sido de las regiones más afectadas por la sequía.
Ya los ganaderos estamos menos presionados, ya llovió, la presa de Jalpan ya está llena, también la olla que tenemos al lado de la asociación de Landa de Matamoros también ya casi está llena; y la verdad es que sí nos cambió el panorama. Yo creo que esto viene a darnos una bocanada de aire para todos los ganaderos y también para la sociedad porque estamos produciendo la comida del país”, externó.
Hay confianza en que los pronósticos de lluvia se mantengan en las próximas semanas, pues si bien ha mejorado la captación del agua no ha sido suficiente debido a que –añadió– persisten presas con un bajo nivel de llenado e incluso algunas vacías.
“Estamos esperando que sigan las lluvias, está pronosticado que sigan las lluvias, nos podemos equivocar, pero estamos esperando que sigan. No ha llovido lo que necesitamos porque muchas presas siguen vacías o con muy poco porcentaje”, previó.
Estrategias
Las lluvias del último mes no cambian las estrategias que delineó el sector para contener la sequía, pues todavía tienen que hacer frente a las afectaciones que en los últimos dos años generó la falta de agua.
Por tanto, el productor explicó que uno de los objetivos es repoblar el ganado y recuperar la caída de 30% del hato ganadero, un descenso que mermó principalmente a las unidades de producción del semidesierto y de la sierra.
El 19 de julio cerraron las ventanillas para que se registraran a la estrategia para el repoblamiento de ganado, como parte del programa enfocado al campo que coordina la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedea).
“Las estrategias ya las teníamos planeadas, ya lo teníamos visibilizado, la estrategia es más que nada el repoblamiento de todo el ganado que se había desechado, 30% que había bajado, ahora a repoblar y con mejoramiento genético que era la idea”, compartió en entrevista.
El 13 de julio las siete presas principales del estado reportaron un llenado de 12.6%, que representa una recuperación de casi 10 puntos porcentuales respecto a 2.8% de llenado que registraron un mes atrás.
La presa de Jalpan retomó 99% de llenado, El Centenario 14%, La Venta 12%, Constitución de 1917 llegó a 8%, San Ildefonso y El Batán a 7%, cada una; y solamente la presa La Llave sigue vacía, de acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Recuperación
Las lluvias que se presentaron desde la segunda quincena de junio han mitigado la sequía que aqueja a la entidad; después de que todo el estado estuvo en los mayores niveles de sequía, la entidad recuperó 11.6% del área sin afectación, al 15 de julio del 2024, reporta el Monitor de Sequía de México (MSM), del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y de la Conagua.
En un mes, la entidad redujo 69.5 puntos porcentuales el área afectada por la sequía excepcional, pasando de 96.3 a 26.8% de la superficie, entre el 15 de junio y el 15 de julio. No obstante, desde la segunda mitad de junio se reflejaron los efectos positivos de las lluvias.
En ese mes, también se redujo de 18 a nueve los municipios en sequía excepcional; al 15 julio, un municipio estaba en condiciones anormalmente secas, tres en sequía moderada, dos en sequía severa y tres en sequía extrema.
Junio, con el mayor nivel de precipitación
En junio del 2024, el estado de Querétaro registró una precipitación pluvial de 132.5 milímetros, un indicador mensual de tres dígitos que no tenía desde 2021, reporta la Conagua.
La precipitación de junio representó 39.9% de los 332.2 milímetros de precipitación que la entidad acumuló en todo el 2023.
En el primer semestre del año, el estado acopió 159.6 milímetros de precipitación pluvial, siendo junio el mes con mayor acumulación hasta el momento.
Estos registros llegan con un antecedente de 648.3 milímetros de precipitación pluvial acumulada en el 2021, en el 2022 descendió a 374.6 milímetros y en el 2023 nuevamente bajó a 332.2 milímetros.
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