Es que una por una, las vacas problemáticas y de bajo rendimiento están saliendo de los rebaños lecheros en los EE. UU.
Hemos sacrificado suficientes vacas para aumentar los precios de la leche

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El polémico título de un artículo publicado la semana pasada desató las críticas de algunos lectores por sincerar lo que está sucediendo en el mercado lácteo de EEUU.

Es que una por una, las vacas problemáticas y de bajo rendimiento están saliendo de los rebaños lecheros en los EE. UU.

El bajo precio de la leche hace que sea más fácil para los productores sacrificar vacas, ya que buscan asegurar una fuente de ganancias alternativa al capitalizar los altos precios de la carne. Sin embargo, la autora se pregunta si se está haciendo lo suficiente como para cambiar la economía láctea actual mediante el sacrificio.

Es que la situación es muy complicada. Sharina Sharp, analista de Daily Dairy comparte que los mercados están tratando de recordar a los productores que controlen el producto.

“Los mercados casi les están gritando a los productores de lácteos que controlen la producción de leche, y los altos precios de la carne de res están amplificando el mensaje”, dice ella.

Phil Plourd, presidente de Insights with Ever.Ag, dice que para deshacerse del excedente de leche en los EE. UU. deben cambiar algunas cosas.

“En pocas palabras, los precios tienen que bajar lo suficiente para estimular la demanda, desalentar la oferta o alguna combinación de ambos”, dice Plourd.

En su opinión, Plourd comparte que los precios han bajado lo suficiente como para desalentar la oferta.

“Hemos visto que las cifras de matanza superan el promedio de cinco años en los últimos dos informes y seguimos escuchando más sobre las salidas de las granjas”, dice. “El proceso es lento, pero ha comenzado”.

La industria entiende muy bien que la historia se repite y sabe que lo que sube, debe bajar. Sin embargo, Plourd advierte que el desafío esta vez es que la demanda no es grande.

“Y, según algunos relatos, se ha ido deteriorando en las últimas semanas”, dice. “Y no solo en los Estados Unidos, sino en otras partes del mundo. ¿El precio del queso por debajo de $ 1,50 generará actividad promocional minorista adicional y, aparentemente, ventas? Seguro. Pero eso no sucede de la noche a la mañana.

La alternativa es tirar la leche

Es que, a estos datos de sacrificio de vacas lechera, la otra alternativa que está encontrando el mercado es la de tirar la leche.

Hay más leche que nunca en los EE. UU., pero no queda ningún lugar para procesarla, lo que obliga a los agricultores de todo el medio oeste superior a tirar el exceso de leche por el desagüe.

El sistema de tratamiento de aguas residuales del Distrito Metropolitano de Alcantarillado de Milwaukee ha estado manejando mayores volúmenes de leche, confirmó un portavoz, aunque no pudo verificar cuánto. Los videos eliminados en las redes sociales a principios de este verano mostraban a los agricultores bombeando miles de galones de exceso de leche directamente en sus campos. Pete Hardin, editor de la publicación con sede en Wisconsin The Milkweed, dijo a los medios locales que el suministro de leche del estado sin lugar para procesamiento podría llenar hasta 50 camiones por día, cada uno con 6,000 a 7,000 galones.

“Sabemos que la leche se está tirando en otras partes del Medio Oeste, no solo en Wisconsin”, dijo Laurie Fischer, fundadora y directora ejecutiva de American Dairy Coalition. “Al mismo tiempo, las granjas están tomando decisiones a medida que los precios de la leche caen a sus niveles más bajos desde el peor período de la pandemia”.

Hay tanta leche que los granjeros de EE. UU. la tiran al alcantarillado1

Varios factores están detrás del último exceso. En los EE. UU., la producción de leche alcanzó un récord en mayo, según muestran los últimos datos del gobierno. Y Wisconsin, el estado productor de queso más grande del país, ha visto aumentar su producción de leche al doble de la tasa nacional el año pasado, dijo Fischer.

La escasez de mano de obra está empeorando el problema, dijo Bob Cropp, profesor emérito y especialista en marketing de productos lácteos de la Universidad de Wisconsin-Madison. El cierre repentino de una planta en Hastings, Minnesota, a principios de este verano debido a problemas con las aguas residuales solo exacerbó el problema.

Son “incapaces de lograr que otras plantas tomen la leche porque tienen toda la leche que necesitan”, dijo Cropp sobre los agricultores de Wisconsin y Minnesota.

Como resultado, los precios de la leche se están hundiendo. Los futuros de leche Benchmark Clase III, un tipo que se usa en la elaboración de queso, tocaron recientemente su nivel más bajo desde la primavera de 2020. El queso también está cayendo. Eso está comenzando a llegar a las tiendas de comestibles, con los precios de la leche al consumidor bajando poco a poco durante tres meses consecutivos, según muestran los datos del gobierno.

En el futuro, algunos granjeros están reduciendo la producción enviando más vacas lecheras al matadero, si el precio de la carne sigue firme la tendencia se acentuará.

“Los precios de la leche están muy por debajo del costo de producción de los agricultores”, dijo Lucas Fuess, analista senior de productos lácteos de RaboBank. “Espero que el tamaño del rebaño y la producción de leche disminuyan en los próximos meses a medida que los agricultores hagan ajustes debido a los bajos precios”.

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