La participación de los legisladores en el fortalecimiento del programa implica no solo asegurar los recursos necesarios para su operación, sino también revisar y optimizar los marcos normativos que faciliten la compra de leche cruda a los productores nacionales. Esto beneficia directamente a miles de ganaderos, quienes encuentran en “Leche para el Bienestar” un comprador seguro y un precio justo para su producción de leche, impulsando así la economía lechera local.

El objetivo central de esta colaboración es ampliar la cobertura del programa, llevando leche subsidiada a más comunidades y hogares, especialmente aquellos en situación de vulnerabilidad. Al asegurar una mayor disponibilidad de leche de calidad, se contribuye directamente a mejorar la nutrición infantil y a combatir la desnutrición, fortaleciendo la seguridad alimentaria en todo el país. Es una inversión social con alto impacto.

Para el sector lácteo, el apoyo de los diputados a un programa de esta envergadura envía una señal positiva al mercado. Demuestra el compromiso del Estado con la producción de leche y con el bienestar de los productores. Además, al garantizar un volumen de compra significativo, se fomenta la inversión en la modernización de las granjas lecheras y en la mejora de la eficiencia productiva de la agroindustria.